A tres semanas escasas de que empiece la navidad, su ambiente ha empezado a inundar nuestras calles. La instalación de las luces es el principal impacto visual que, junto con la bajada de la temperatura y la decoración de las tiendas, nos mete de lleno en uno de los momentos más esperados del año.
Esta época del año viene marcada por la felicidad, la familia y, cómo no, la carta a los Reyes Magos. Es un momento muy especial para los más peques de la familia, que empiezan a sentir y comprender el espíritu de la navidad. Por ello, es importante que, desde que son pequeños, cuidemos hasta el más mínimo de los detalles para que comprendan que la navidad es mucho más que regalos.
A todos nos encanta la sensación de desenvolver lo que los reyes nos han traído con mucho esmero, es innegable. Pero, cuando hablemos con los Reyes Magos o con Papá Noel, dependiendo de por quién sintamos más afinidad, no nos olvidemos de decirles qué tipos de regalos son los mejores para nuestros pequeños.
Aprovechemos esta oportunidad para pedirles que les traigan juguetes que favorezcan su crecimiento. Jugando pueden desarrollar muchas habilidades y aptitudes como, por ejemplo, el lenguaje, la creatividad o la psicomotricidad. Es importante adecuarse a la edad de nuestros hijos, cada juguete está enfocado para un momento específico de su infancia. Aunque si hay algo realmente importante, es cuidar la calidad y seguridad de los juguetes, sobre todo con los más pequeños. Tienen una indómita tendencia de llevarse todo lo que cogen a la boca.
Recordemos que por encima de toda esa infinidad de cosas materiales, hay algo que ni los reyes ni Papá Noel les pueden regalar. El mejor regalo, sin duda, es pasar tiempo con ellos y compartir esta bonita experiencia.
